Para todos aquellos que estén  pensando  en  viajar  a  Cantabria  con  niños:  ¡están  de  suerte!

Desde mucho tiempo atrás, esta preciosa comunidad autónoma ha cuidado especialmente el turismo familiar.

A continuación, te presentamos 14 estupendos planes con niños para disfrutar en Cantabria, y que, además, los adultos encontrarán de gran interés.

1. Cabárceno.

El Parque de la Naturaleza de Cabárceno se encuentra, a tan sólo, 25 minutos del Hotel San Román de Escalante. Se trata de la atracción turística más visitada en Cantabria, ideal para visitarlo con niños. El Parque de la Naturaleza de Cabárceno constituye un magnífico paraíso natural: es el hogar de más de cien especies de animales, procedentes de los cinco continentes.

Allí, los animales viven en régimen de semilibertad. La visita puede realizarse, bien en coche particular o bicicleta, circulando por los más de 20 kilómetros de carreteras que atraviesan el parque, y deteniéndose en los aparcamientos habilitados para contemplar las especies.

 Éstas también se pueden observar desde el aire, a bordo de las telecabinas que sobrevuelan algunos recintos. Existen otras actividades paralelas, incluidas con la entrada, como la exhibición de aves rapaces, o la demostración de leones marinos.

2. Santoña y el Faro del Caballo.

A menos de 6 km. del Hotel, se encuentra la localidad costera de Santoña. Este municipio es considerado uno de los destinos más populares de Cantabria, perfecto para una visita con niños.

Además de ser reconocido internacionalmente por sus anchoas, Santoña cuenta con numerosos atractivos turísticos. Sus calles y playas atraen cada vez a más visitantes.

Os recomendamos una visita al famoso Faro del Caballo, si los niños son muy pequeños o no se dispone de la condición física adecuada, la mejor opción, indudablemente, es ir en barco.

Ese paseo en barco por la bahía de Santoña te llevará hasta el Faro del Caballo, y hace parada en Laredo, donde podréis turistear y posteriormente seguir la ruta en barco hasta Santoña.

El paisaje es espectacular. No es la típica “turistada”, lo recomendamos a todo el mundo. Los más pequeños lo disfrutan un montón. Además, al finalizar el viaje, les harán entrega de un diploma náutico, y se podrán hacer una  foto con  la  gorra del capitán.

Otra de las paradas que también recomendamos, es contratar una visita guiada a una fábrica conservera de anchoas, donde elaboran los filetes de anchoa.  Posteriormente, disfrutareis de una degustación de anchoas de Santoña.

Uno de los lugares más bonitos de Santoña es su paseo marítimo, también conocido como el pasaje. Allí, se puede pasear relajadamente, admirando las marismas de Santoña, Victoria y Joyel y su espectacular bahía.

Imprescindible si se visita Santoña, es comer o cenar en uno de los dos “merenderos” que hay. Ofrecen pescado fresco a la brasa, aunque también ofrecen carne. El ambiente es relajado e informal. Ambos merenderos se ubican en el pasaje; Casa Emilia está al lado de la plaza de toros y El Chili debajo del Fuerte de San Martin.

Otro de los tesoros de Santoña, es su Playa de Berria, los surfistas dicen que tiene las mejores olas de Cantabria. En Berria encontrarás varias escuelas de surf, donde ofertan desde campamentos de surf, hasta clases sueltas para principiantes, niños y adultos.

¡Vale la pena disfrutar de la experiencia de surfear en el Cantábrico!

3. Santander con niños: una ciudad con mucho encanto.

A 30 minutos del Hotel San Román se encuentra Santander, la capital de Cantabria.

Santander es una ciudad en la que se aprecia un gran encanto y singularidad. La ciudad ofrece una amplia variedad de planes para hacer con niños. Os recomendamos una visita a la Península de la Magdalena, en Santander.

Posee uno de los mejores parques infantiles al aire libre de Santander, así como un pequeño zoo marino en el que viven pingüinos y focas, o la exposición permanente “El Hombre y el Mar”. También podemos apreciar el Palacio de la Magdalena, o el emblemático Magdaleno (trenecito turístico que recorre la península de la Magdalena).

Dado que se ubica entre playas, cada día es más difícil aparcar en la zona. Es recomendable trasladarse hasta allí utilizando transporte público, en la parada del mismo nombre: “La Magdalena”.

Otra excelente opción para ir con niños, especialmente en los días que llueve, es visitar el Museo Marítimo del Cantábrico, y contemplar los animales y curiosidades marítimas. 

Se trata de un Museo didáctico, que cuenta con un pequeño acuario representativo de las especies del Mar Cantábrico. Es impresionante el esqueleto de 24 m. de un cetáceo.

Otra de las actividades recomendadas para realizar con niños, es disfrutar de un paseo en barco por la Bahía de Santander. Conoceréis la ciudad desde otro ángulo de forma relajada, algo que agradeceréis si vais con niños de corta edad, o con carritos.

4. Visitar una Granja: ¡les encantará a los niños!

Uno de los planes favoritos de las familias que vienen a Cantabria es visitar una granja.

Se trata de una de las actividades didácticas que más gustan a los niños: descubrirán el trabajo de agricultura y ganadería que se realiza en una granja.

En Cantabria existen varias granjas que es posible visitar con niños, entre ellas están la Granja El Pendo o Granja Cudaña.

Una de estas granjas es la Granja Marismas de Santa Ana. Se ubica en Santoña, a unos 3 kilómetros del Hotel San Román de Escalante.

Cuentan con unas preciosas vistas de las Marismas de Santoña y la playa de Berria. Los niños aprenderán qué comen los animales, cómo se limpian, y podrán admirar terneras y terneros, novillas, vacas y el toro.

Poseen un aula donde ofrecen talleres para elaborar queso y mantequilla, o bien, quesadas y sobaos. Finalmente, les ofrecen a degustar sus productos.

5. Surf, toda una aventura para todas las edades.

Cantabria cuenta con gran tradición surfera, por lo que hay un montón de escuelas de surf.

Un plan ideal para hacer con niños. Próximo al Hotel San Román de Escalante, se encuentran las playas de Berria, en Santoña, y la playa del Ris, en Noja.

Estas playas cuentan con varias escuelas de surf. Se trata de una experiencia muy recomendable para toda la familia, pudiendo practicarlo hasta los más pequeños de 5 o 6 años.

6. El descenso del río Asón con niños.

Una apacible excursión por el río Asón en kayak, es una actividad para toda la familia. En el caso de los niños, está recomendada a partir de los 4 años.

El río Asón se encuentra tan sólo a 15 minutos del Hotel San Roman de Escalante.

Son varias las empresas que ofrecen excursiones en kayak, la mayoría ubicadas en los pueblos de Ampuero y Ramales de la Victoria.

Lo mejor de este descenso, apto para niños, es que tiene un poco de todo: zonas de rápidos, zonas tranquilas de aguas mansas donde disfrutar su rica fauna y flora y algún saltito, ideal para dar el toque de adrenalina.

7. Poblados cántabros de Cabezón de la Sal y de Argüeso.

Estos parques arqueológicos son toda una recreación de la vida cotidiana de los pueblos cántabros durante la Edad del Hierro.

El nivel de detalle es increíble, ya que se basa en excavaciones y en el estudio exhaustivo de la vida de los antiguos habitantes de Cantabria. Las visitas son guiadas y duran más de 1 hora, aunque puedes irte e incorporarte en cualquier momento.

La visita consiste en un recorrido por las cabañas, construidas exactamente igual que antaño. Para ello, se han empleado materiales tales como arcilla, agua, piedra y techos vegetales.

Una clase de historia muy entretenida y diferente. Además, también realizan actividades para que los más pequeños aprendan jugando.

8. Laberinto de Villapresente.

Una actividad diferente, divertida y entrañable para realizar con niños.

Se trata de un laberinto algo complicado, pero resulta ameno ya que vas encontrando a gente que está igual de perdida que tú. De todos modos, si te agobias, cuenta con salidas de emergencia para abandonar el laberinto en cualquier momento.

No es recomendable ir en días de lluvia ya que no se admiten paraguas en el interior.

El precio de la entrada es de 8€ para los adultos y 6€ para los niños hasta 12 años. Al finalizar, puedes subir a una torre desde la que contemplas todo el recorrido y ves a la gente intentando salir como hace 10 minutos estabas tú. Muy divertido para pasar unas horas desconectado del mundo.

Luego te puedes tomar algo refrescante en el bar y algo para picar.

9. El Laberinto de Maíz: La Flor.

A escasos 30 minutos del Hotel San Roman de Escalante, se encuentra el Laberinto de Maíz La Flor, en San Román de Cayón, muy cerquita del Parque de Naturaleza de Cabárceno.

En pocos años, el Laberinto de Maíz de Cayón se ha convertido en uno de los referentes turísticos y de ocio de Cantabria, apto para visitar con niños.

Un laberinto de maíz gigante, fruto de la imaginación de Jesús Alonso (Chus), quien se inspiró en un capítulo de los Simpson, que les dio la idea.

Y, con tanto maíz que se cultiva en Cantabria, ¿por qué no  crear  uno propio? Así que se animaron a crear un laberinto de maíz gigante en su finca de la Granja La Flor.

10. Bosque de Secuoyas de Cabezón de la Sal.

Paseando por el bosque de secuoyas te sientes diminuto ante la inmensidad de estos enormes árboles. Lo mejor de este plan en Cantabria, apto para niños, es que es gratis y totalmente accesible si vas con carrito infantil (aunque como siempre, te recomiendo que portees a tu bebé).

A pocos metros del acceso al bosque hay un aparcamiento, donde dejar gratis el coche. Después, tan sólo has de coger el camino que lleva hasta la entrada principal. Ésta, conduce a unas pasarelas de madera que llevan hasta las secuoyas. 

Existen rutas de senderismo que se pueden hacer por el bosque.  O si no, otra opción es simplemente caminar un poco entre las secuoyas.

11. Parque mitológico de Mina Pepita.

A escasos 25 minutos del Hotel San Román de Escalante se encuentra el Parque Mitológico de Mina Pepita, en la localidad de Solares. El parque reúne a todos los dioses de la mitología cántabra en un único lugar.

Una arboleda en el centro del pueblo, en la que podrás conocer al anciano Arbolón, habitual vigilante del parque, al músico Musgoso, que ameniza con su flauta el recorrido mágico por las  entrañas del  lugar, o al  travieso Ojáncano.

Todo ello, envuelto en la idílica y envolvente atmósfera que crean las ‘anjanas’, unas simpáticas criaturas que aportan colorido y magia al lugar, desde donde se pueden hacer realidad todos nuestros deseos.

El parque goza de un maravilloso entorno natural, gracias a su ubicación en las faldas de la legendaria montaña del Hierro, que acoge a todos estos seres mitológicos.

12. Recorrer la ruta cántabra de los faros.

Los faros fascinan a los niños. Si vienes a Cantabria con niños, no dudes en realizar una visita a los faros: será una excelente idea. A continuación, os mencionamos los faros de Cantabria:

• Faro del Castillo de Santa Ana, en Castro Urdiales.
• Faro del Caballo, en Santoña.
• Faro del Pescador, en Santoña.
• Faro de Ajo, en Ajo.
• Faro de la Isla de Mouro, en Santander.
• Faro de la Cerda, en Santander.
• Faro de Cabo Mayor, en Santander.
• Faro de Punta del Torco de Afuera, en Suances.
• Faro de Punta Silla, en San Vicente de la Barquera.

Si, en lugar de realizar la ruta de los faros, os interesa visitar alguno de los mencionados, sin duda os recomendaría visitar el Faro del Caballo en Santoña, el Faro de Ajo, o bien el Faro del Castillo de Santa Ana, en Castro Urdiales, todos situados en la costa oriental de Cantabria.

13. Cueva de El Soplao.

La Cueva del Soplao es uno de los atractivos turísticos que más impactará a los niños, y que creemos, no debería faltar en un viaje a Cantabria.

Se trata de una obra de arte de la naturaleza. A lo largo de miles de años, se han ido formando estalactitas, estalagmitas y un sinfín de formas increíbles. Para visitar la cueva, se accede a ésta mediante un trenecito, y posteriormente se realiza la visita andando. A pesar de ser bastante accesible, no está permitida la entrada de carritos infantiles.

En el interior hace fresquito, pues cuenta con una temperatura que oscila los 12-14ºC. Así que, si vas en verano,  no olvides llevar alguna  chaqueta.

El recorrido tiene una duración aproximada de una hora. En el interior de la cueva no está permitido tomar fotografías.

14. Disfrutar de las playas más familiares de Cantabria

El Hotel San Román de Escalante se encuentra a tan sólo cinco minutos de la costa oriental, cuajada de un sinfín de estupendas playas familiares. Relajarte en sus confortables playas, durante tu viaje a Cantabria en verano, es un plan ideal para hacer con niños. 

En nuestra costa podéis encontrar, desde playas con aguas tranquilas con pozas, como la playa del Sable, en Isla, o la Playa de Helgueras, en Noja, a playas con aguas bravas, ideales para que los niños puedan iniciarse en deportes acuáticos, como el surf o el paddle-surf, como la playa de Berria, en Santoña, o la playa del Ris, en Noja.

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